Una bolsa pensada para el día a día
Cada diseño surge de la idea de acompañarte todos los días: para hacer las compras, en una salida por la ciudad, en un paseo o en la rutina del trabajo. Buscamos un equilibrio entre lo lindo, lo útil y lo duradero.
Materiales y confección
Confeccionamos nuestras bolsas con telas resistentes, fáciles de lavar y que mantienen su forma con el uso. Recomendamos lavarlas a mano, aunque también podés hacerlo en lavarropas con agua fría; se secan rápido y quedan como nuevas.
Trabajamos en pequeñas producciones, cuidando cada detalle: costuras, terminaciones y packaging. Todo es de industria nacional, hecho con mucho amor y dedicación. Elegimos las telas poniéndolas a prueba, las llevamos al taller de corte y al taller de costura. Luego, hacemos control de calidad y cortamos y pegamos el packaging. No entregamos bolsas, porque queremos reducir el uso de plástico y acompañar un consumo más responsable.
Además, aprovechamos al máximo cada metro de tela. No generamos casi desperdicio, y los pequeños retazos que quedan los reservamos para futuros proyectos —como relleno de almohadones o colaboraciones con otras marcas—, buscando siempre darles una nueva vida.
Diseño con propósito
Elegir una bolsa reutilizable es un gesto pequeño con impacto. No solo reduce residuos, sino que también apoya la industria local y el trabajo artesanal. Para Bag to earth, el diseño es una forma de transmitir esos valores: funcionalidad, estética y responsabilidad.
Cada bolsa que sale del taller lleva un pedacito de la historia de quienes la hicieron: dedicación, tiempo y mucho cuidado.
Por qué vale la pena
- Durabilidad: tela y costuras pensadas para durar.
- Funcionalidad: plegables, livianas y fáciles de guardar.
- Impacto local: industria nacional y producción consciente.
Si te interesa lo que hacemos, te invitamos a conocer los modelos disponibles y elegir la que más te guste.
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